NUEVA CONDENA, DEL TSJA, PARA EL ALCALDE DAVID TOSCANO (PP) Y SU EQUIPO DE GOBIERNO POR DAÑO MORAL Y VULNERACIÓN DEL DERECHO A LA LIBERTAD IDEOLÓGICA DE UNA TRABAJADORA DESPEDIDA. LA SENTENCIA DECLARA NULO EL DESPIDO, ESTABLECIENDO UNA INDEMNIZACIÓN Y LA RESTITUCIÓN DE LOS DERECHOS DE LA CIUDADANA.
Nueva sentencia, en este caso del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que se suma a las más de veinte que acumula el alcalde David Toscano (PP). No es un buen dato para el curriculum de un gobernante; así como tampoco lo es para su equipo de gobierno, que comparte condena y responsabilidad. Todo esto sucede en Aljaraque (Huelva-Andalucía-España). La sentencia declara nulo el despido de una trabajadora municipal por vulneración del derecho a la libertad ideológica, reconoce daños morales y condena a la restitución de derechos. Habrá, además, una indemnización; pero saldrá de los impuestos de los vecinos y vecinas del municipio de Aljaraque que, de esta manera, siguen soportando los despropósitos del alcalde David Toscano (PP) y de sus concejales: no sólo han vulnerado los derechos de una ciudadana sino que, además, abonarán las indemnizaciones con dinero público. Con dinero de todos.
La trabajadora despedida desarrollaba funciones de coordinadora de desarrollo local en el consistorio aljaraqueño, estando vinculada al PSOE. Según recoge la sentencia, una vez despedida, su puesto fue ocupado por otra trabajadora, que ostentaba dentro de la
estructura provincial del PP el cargo de secretaria de desarrollo local.
UN GOBERNANTE CONDENADO EN ESTOS TÉRMINOS DEBE DIMITIR. UN TRIBUNAL ESTÁ RECONOCIENDO QUE HA OCASIONADO CON SU ACTUACIÓN DAÑO MORAL A UN CIUDADANO. POR ELLO QUEDA DESLEGITIMADO. NO DEBE SEGUIR GOBERNANDO.
UN GOBERNANTE CONDENADO EN ESTOS TÉRMINOS DEBE DIMITIR. UN TRIBUNAL ESTÁ RECONOCIENDO QUE HA OCASIONADO CON SU ACTUACIÓN DAÑO MORAL A UN CIUDADANO. POR ELLO QUEDA DESLEGITIMADO. NO DEBE SEGUIR GOBERNANDO.
T O S C A N O D I M I S I Ó N
La Plataforma Ciudadana del Municipio de Aljaraque comparte la alegría de esta trabajadora y su familia. En democracia sólo hay un camino, que pasa por el respeto a la ciudadanía y a las libertades fundamentales.
